Superficie: 114.9 Km ²
Nº de habitantes: 12.919 (INE 2006)
Altitud: 177 metros
Distancia a Murcia: 40 Km
Lugares de interés: Iglesia de San
Pablo, Ermita de San Cosme y San Damián,
Santuario de Nuestra Señora del Oro.
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El
viajero camina por sus calles íntimas,
asciende sinuosas pendientes, angostas escaleras,
y agradece, en lo más alto, el sosiego
de una plaza recoleta |
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Pese
a que el escudo de la villa apenas tiene cuarenta años
de historia, el blasón diseñado por el
profesor Antonio de Hoyos se ha consolidado como símbolo
del pueblo. El proyecto, ligeramente modificado por
la Real Academia de la Historia, conserva básicamente
los símbolos propuestos: la Cruz de Santiago,
la media luna y el río, base de su vida y economía,
permanecieron tal y como de Hoyos lo había ideado.
La Academia de Madrid cambió la corona de realengo
por la de señor -de doce puntas- y la disposición
de la media luna, que la situó al margen izquierdo
de la cruz jacobea, quitando de su iconografía
un árbol frutal y la leyenda que originariamente
lo rodeaba -Vive siempre la paz del valle-. El
escudo está enmarcado en campo de plata. [Ver]
La bandera de Abarán es de color blanco con una
banda verde cargada de otra disminuida en la mitad de
azul celeste.
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Asentada en un cabezo, desde la Sierra del Oro se percibe
Abarán
en el hondón de un valle cercado por montañas
y una sucesión de huertas abrazadas a los márgenes
del río Segura que, como un tapiz de verdes, se extienden
siguiendo el curso fluvial y hasta triscando por las estribaciones
de los cerros que anuncian la embocadura del Valle de Ricote.
El viajero camina por sus calles
íntimas, asciende sinuosas pendientes, angostas
escaleras, y agradece, en lo más alto, el sosiego de
una plaza recoleta, la figura encorvada de una anciana en
el umbral de la iglesia y el tañido de una campana
que convoca al vecindario.
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Paseo
de la ermita
de Abarán
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En la cima del cerro que por el noroeste la domina se construyó
en 1834 una ermita bajo la advocación de los mártires
San Cosme y San Damián, cuya veneración ha propiciado
que la villa comparta, con Caravaca y Murcia, la concesión
del año jubilar. La Balconada, en el paseo
de la Ermita, ofrece una panorámica muy sugerente:
la raya del río que caracolea por el valle, el verde
escalonado de los bancales, el nítido azul del cielo,
la luz hiriente que agosta los montes, sierras y riscos del
Valle de Ricote.
Con Lorquí, Ulea, Blanca, Ricote, Villanueva, Archena,
Ojós, Alguazas, Las Torres de Cotillas y Ceutí,
Abarán es una de las once villas que forman el mítico
Val.
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Ermita
de San Cosme y San Damián
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Hospitalaria, sencilla y emprendedora, de costumbres muy
arraigadas, cuando en el siglo XVIII el país inicia
un cierto progreso económico la secular Favaran ya
anda a la cabeza de otros pueblos limítrofes: obras
para regadío, puentes y edificaciones urbanas sientan
unas bases de las que todavía presume su paisaje y
su historia (la acequia Charrara, la Ermita
de los patronos Cosme y Damián, el Ayuntamiento,
la Iglesia de San Pablo y la Solana).
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